La personalidad de los empleados se transmite analizando su propio espacio de trabajo.
El lugar físico donde trabajamos es uno de los espacios donde más horas del día pasamos, por lo que el mobiliario, orden y elementos decorativos que añadimos nosotros mismos lo convierte en un espacio muy personal.
LO QUE INDICAN: FOTOGRAFÍAS, PLANTAS Y ORDEN
Algunos elementos como las fotografías demuestran que se es una persona afectuosa y que valora a los demás, no obstante, un exceso de éstas o imágenes un poco más íntimas puede restarnos aspecto de profesionalidad. Normalmente están colocadas en el escritorio, enganchadas en las mamparas de oficina o tabiques móviles o incluso de fondo de pantalla.
Los adornos como algunas plantas, un posavasos u otros elementos transmiten que nos sentimos cómodos trabajando ahí y que le damos un toque hogareño a nuestro espacio laboral.
En tercer lugar, otro de los aspectos que más habla de nosotros en la oficina es el orden. Un empleado perfeccionista se suele caracterizar por tener un sólo documento fuera de su archivador, nada de pegatinas alrededor del monitor del ordenador y un escritorio limpio y con espacio libre. Por el contrario, los empleados más desordenados suelen acumular multitud de papeles sin clasificar, lápices… y un sinfín de objetos y documentos que dificultan el trabajo. Si trasladamos estos hechos a la personalidad del trabajador, el 90% coincide exactamente con su tipo de personalidad y su relación con los demás en la vida diaria.
LO QUE EL ENTORNO AL ESCRITORIO PUEDE OFRECER A LOS TRABAJADORES
Y aunque es un tema que no se le suele dar mucha importancia, una oficina bien iluminada, limpia y una buena decoración hace que se convierta en un lugar óptimo para trabajar. Tanto es así que en la actualidad, existe toda una corriente destinada a esta labor en la que expertos decoradores y arquitectos del mundo tratan de confeccionar oficinas sostenibles junto con una decoración que fomente la productividad y mejore el ambiente laboral.
Uno de los elementos que más importancia ha adquirido son las mamparas de oficina que permiten a los directivos supervisar a los trabajadores a la vez que éstos también poseen su propio espacio de privacidad donde poder concentrarse mejor. Este tipo de mobiliario de oficina además, se adapta perfectamente a las necesidades laborales de cada momento, ya que en el caso de los tabiques móviles, en unos minutos se puede convertir una única sala en una auténtica sala abierta donde todos los trabajadores pueden hacer una puesta en común y trabajar en grupo.
Imagen: Pinterest @Mary Lou
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